Aprovechando el nuevo año pensé interesante hacer una nueva entrada tras un largo letargo. 

Desde entonces, el mundo ha cambiado mucho debido a la pandemia aunque personalmente no me ha afectado demasiado en mi vida al trabajar en casa y ser bastante casero.

En este tiempo he seguido trabajando pese a muchos problemas complicados de afrontar. Ser un desarrollador indie que trabaja en solitario hace que siempre esté en el filo de la navaja ya que te la juegas en cada uno de los proyectos y en alguna ocasión es necesario coger algún encargo para seguir adelante… y esto siempre será así hasta que tenga algún éxito rotundo. Éxito que no se sabe si llegará pero que se le espera… porque esto va de esperanza y mucho picar piedra para que en casos que se alineen los planetas, tengas lo mejor que puedes ofrecer.

Hasta entonces, los proyectos no han vendido demasiado y el tiempo de desarrollo versus economía no eran muy rentables. En las navidades de 2019 lancé Dungeonoid, una especie de arkanoid mezclado con un RPG. El motivo de hacer un juego de este tipo fue el de reducir los tiempos de desarrollo y parece que salió más rentable. En unas semanas el publisher se encargará de portearlo a ps5 para rentabilizarlo un poco más.

Tras ese proyecto me centré en PigShip, un shmup o juego de naves, cuyo prototipo estaba oculto en Purrs in Heaven. El proyecto debía estar listo a mediados de año pero graves problemas con el compositor hizo que se alargara hasta noviembre. Finalmente el proyecto ya está en manos del publisher para publicarlo en Nintendo Switch y posteriormente en Ps5, así que esperemos que la cosa funcione bien.

Este 2022 planeo lanzar juego nuevo y retomar un prototipo que tenía avanzado y que espero tenerlo listo para 2023 así que si consigo llevar una mínima constancia en el blog, ya os iría dando más detalles.

Que tengáis una feliz entrada de año! 🙂

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